Si has luchado alguna vez con una adicción ya sea alcoholismo, adicción a la comida u otros, sabes que cuando estamos en esta lucha adoptamos comportamientos que se interponen en nuestras relaciones, nuestro éxito y nuestra capacidad para lograr una vida plena. La negación es un arma poderosa cuando no queremos aceptar la realidad.
Sin embargo, estos malos comportamientos que son puntos ciegos para nosotros a menudo son obvios para quienes nos rodean. Uno de esos comportamientos adictivos que causa un daño masivo a nuestro bienestar mental y físico es el exceso de trabajo.
¿Cuántas horas trabajas al día?
Sé sincero. La única persona a la que estás lastimando al mentir eres tú misma. Si trabajas regularmente más de 55 a 60 horas a la semana, es MUCHO.
Existe una razón por la que la semana laboral se fijó en alrededor de 37 a 40 horas. Esto se debe a que, como seres humanos, no estamos diseñados para trabajar de forma eficaz y eficiente durante más tiempo. Esas horas de trabajo prolongadas son contraproducentes y agotadoras en la mayoría de los casos. (No puedo negar que existen super humanos para quienes el trabajo pareciera más bien energizarlos. Sin embargo a la larga, en la mayoría de los casos, termina siendo dañino para la salud).
¿Por qué nos convertimos en adictos al trabajo?
El agotamiento laboral ha estado presente durante mucho tiempo y se ha incrementado con la Pandemia. Sin embargo- este problema ha evolucionado debido a la actual cultura de expectativas, en la que para ser visto como un buen trabajador, un gran triunfador, de alto rendimiento y exitoso, siempre deber dar más, trabajar más duro y mucho más tiempo que los demás. Esta cultura establece que el buen trabajador no puede irse a casa temprano o a tiempo.
Esto es peor, si aspiras a un mejor puesto de trabajo o un mejor salario. Si es así, se espera que no te quejes si te piden llegar más temprano y si te piden que te quedes hasta tarde o que te lleves a casa el trabajo para terminar durante la noche o el fin de semana. Especialmente si eres el jefe porque debes “predica con el ejemplo”. Si eres el Jefe se espera que tengas que hacer sacrificios. No podrás asistir al juego de futbol de tus hijos o irte de vacaciones. Incluso si puede irte, tendrás que llevar tu teléfono celular y computadora del trabajo en caso de que necesites ser contactado, o se necesite una reunión urgente que requiera tu presencia.
¿Cuales son las consecuencias de la adición al trabajo?
Ansiedad, depresión, trastorno de pánico, agotamiento, insomnio, enfermedad cardiovascular (con un mayor riesgo de ataque cardíaco y accidente cerebrovascular) y suicidio. No creo que ninguna de estas sean cosas a las que queremos aspirar.
El trabajo es importante para proporcionarnos un salario para pagar las facturas y mantener un techo sobre nuestra cabeza. Pero nunca con la intención de acortar nuestra vida. No es broma, la adicción al trabajo es dañina.
¿Quiénes son más afectados?
Se estima que entre el 7% y el 10% de la población es adicta al trabajo.
Para algunos, el trabajo es una especie de escape de problemas familiares o dificultades en las relaciones.
Para algunos, los problemas financieros aprietan demasiado y trabajar en tres empleos es la única forma de mantener la cabeza fuera del agua.
Para otros, es necesario porque eres Emprendedor. No puedes darte el lujo de decir que no a un trabajo potencial porque no sabes cuándo llegará el próximo trabajo.
O eres ambicioso, con ganas de dejar una huella y ser conocido como LA persona a quien acudir en su campo en particular.
O su jefe es un fulano irracional que no quiere escuchar su historia de que su carga de trabajo es demasiado alta. Su respuesta fue: "si no quieres el trabajo, se lo daré a alguien que sí lo quiera".
¿Con cual te identificas?
Y hay quienes aman tanto su trabajo, porque lo ven como su pasión y vocación. Prefieren trabajar todo el tiempo porque significa mucho y su trabajo es su mundo. Este enfoque desequilibrado de la vida significa que no queda tiempo para cualquier otra faceta importante de la vida.
Como experta en Bienestar Laboral, he sido testigo de primera mano de cómo trabajar en entornos de alto estrés y gran carga de trabajo aumenta significativamente los niveles de estrés y problemas de salud. No solo esto, normalmente terminas anteponiendo las necesidades de los demás a las tuyas y por supuesto afectado tus relaciones.
¿Cómo superarlo?
Como adicto al trabajo en recuperación que soy, comprendo algunos de los desafíos que plantea la adicción al trabajo. Como cualquier adicción, debes comenzar con la conciencia de que trabajar demasiado es dañino y, en segundo lugar, estar listo para hacer algo al respecto.
Mi trabajo es importante y necesario
Por supuesto que es. Si no fuera así, no habría pasado tanto tiempo haciéndolo.
Pero, ¿Es tu trabajo una forma de escapar de otras preocupaciones o una adicción pura?
Lo primero podría ser una señal de que está evitando resolver esos otros problemas o que no puedes resolverlos. Y lo segundo supone que te has creído que eres indispensable, que otros no pueden hacer el mismo trabajo o que el negocio se hundirá si tu no estás allí.
Tener delirios de grandeza no ayuda.
Eres humano (como todos los demás)
Eres falible, vulnerable y, a veces, te fastidia (como todos los demás).
No puedo dejar de pensar en el trabajo
Si está pensando constantemente en el trabajo cuando está despierto y durante la noche, es difícil desconectarte y relajarte:
Esto requiere:
Darte permiso para establecer algunos límites en torno a los tiempos de inicio y fin de la jornada laboral.
Hablar con tu familia, tus colegas y tu jefe sobre la posibilidad de ayuda para lo que haces.
Es hora de desconectar el teléfono y la computadora cuando no es necesario, es decir, durante la cena o después de cierta hora de la noche. Se ha demostrado que desconectarse de tu tecnología de esta manera reduce los niveles de estrés y la presión arterial.
No tengo nada más en mi vida que me guste hacer.
Adopta un pasatiempo o un deporte. Esta es una estrategia de distracción útil. Dejar de lado las excusas habituales de la falta de tiempo o la fatiga e invierte en algo que puedes hacer cada semana durante un tiempo determinado, que puedes disfrutar. Es una forma muy eficaz de romper el hábito de trabajar sin parar.
No puedo hacer esto por mi cuenta.
Cambiar comportamientos arraigados y superar la adicción puede ser difícil. No tengas miedo. Busca ayuda de un profesional en el tema.
Comments