Si pensamos en el “bienestar”, vemos que es simplemente estar bien. ¿Cuándo damos lo mejor? Cuando estamos bien.
En la era del conocimiento se nos paga por las ideas que generamos y generamos las mejores ideas cuando hay bienestar. Cuando una persona está contenta, genera el mejor producto y brinda el mejor servicio. En cambio, si la persona tiene mal-estar, estará mal y no dará lo mejor de sí mismo.
El bienestar libera el potencial creativo. Cuando más bienestar integral tengan los colaboradores -físico, mental, emocional y espiritual- producirán las mejores ideas y propuestas. Los ambientes de trabajo serán más felices y saludables
Convertir a una organización en un Lugar de trabajo saludable y feliz, (Workplace Wellness) implica inversión en focalizar esfuerzos en bienestar, salario emocional, energía, estrategia, dirección y preocupación auténtica por las personas. Las organizaciones que logran convertirse en un Lugar de Trabajo Saludable, son más humanas, atractivas y aspiracionales para cualquiera. Hoy, trabajar en una empresa feliz es uno de los objetivos que mucha gente se propone.
Un error muy común que se detecta en las organizaciones es trabajar focalizado exclusivamente en las actividades operativas, olvidando que las mismas son desarrolladas y ejecutadas por personas insertas en un cierto contexto cultural. Como Peter Drucker bien dijo: “La cultura se come a la estrategia en el desayuno”. ¿Qué significa esto? Que la mejor estrategia será imposible de ejecutar, si la cultura cotidiana no está alineada con la misma. (Fuente: Universidad de Nebrija)
Debemos comprender que la cultura del bienestar es un camino que tiene buenos momentos y otros que no lo son, pero es un destino que nos marca un norte. Cuantas más acciones generemos que nos acerquen a nuestro propósito, mucho mejor será.
En ese sentido, 2020 llega a su fin, todos estamos sintiendo un suspiro colectivo de alivio!
Ha sido un año desafiante en muchos niveles. Y aunque la promesa de una vacuna en e 2021 parece alentadora, todavía hay retos por delante.
De los efectos económicos derivados de la pandemia probablemente tomarán mucho tiempo poder recuperarse.
Estamos en una crisis de salud, cuyo alcance y gravedad nunca antes la había experimentado el mundo.
La Organización Mundial de la Salud publicó recientemente un informe, de 130 países encuestados el 93% informó que los servicios de salud mental se han interrumpido como resultado de la pandemia, en un momento en que esos servicios se necesitan más que nunca.
Es necesario entonces, un nuevo enfoque que reconozca: La importancia de reconocer y tratar los problemas de salud de manera proactiva, trabajando en la prevención. Necesitamos estar enfocados en cuidar nuestro bienestar en el hogar y en el trabajo, Porque la prevención YA NO es es opcional.
¿Por qué las Organizaciones son las llamadas a tomar acción?
Sin lugar a dudas, las organizaciones y sus lideres son los llamados a comenzar y promover la cultura del bienestar. En la actualidad, se estima que mueren 2.0 millones de hombres y mujeres cada año como resultado de accidentes, enfermedades o heridas relacionadas con el trabajo, y 160 millones de nuevos casos de enfermedad directamente relacionadas con el trabajo.
Crear una cultura hacia el bienestar en el lugar de trabajo puede:
Mejorar los niveles de estrés, cuya tasa de crecimiento aumentó sustancialmente durante la pandemia.
Mejorar fatiga crónica
Menos enfermedades (diabetes, hipertensión etc.)
Menos agotamiento emocional
Además, ¿qué pasaría si los costos humanos del ausentismo, el presentismo y la rotación del personal pudieran reducirse?
¿Qué pasaría si su empresa se convirtiera en un imán para los mejores talentos porque es reconocida como un excelente lugar para trabajar?
¿Qué pasaría si disfrutara de un aumento en la productividad, el rendimiento y las ganancias?
Entonces, en primer lugar, eliminemos el mito más grande en el lugar de trabajo moderno, que es: esperar un alto estrés en el trabajo.
Hay cuatro cosas a tener en cuenta al elaborar un programa de bienestar:
1. Manejo de estrés
Lograr un entorno de trabajo adecuado incluye la asignación de tiempo para tener un respiro mental durante la jornada laboral y otros aspectos, especialmente cuando se trabaja desde casa.
2. La salud física es un deber, no un tal vez.
Se trata ayudar a crear los hábitos diarios que sirven para mantenernos bien física y mentalmente. Son esas cosas que sabemos que marcan la mayor diferencia, pero durante demasiado tiempo han estado al final de la lista de prioridades o ni siquiera están incluidas.
3. Garantizar la seguridad psicológica en el trabajo.
Como seres humanos, buscamos propósito y significado, reconocimiento y conexión humana positiva. Esto es lo que conduce a mayores tasas de participación.
4. Hacer del bienestar la NORMA.
Es primordial entonces poner a la felicidad y el bienestar en la agenda del negocio, aunque muchas veces se la considere una cuestión obvia o superficial. La función de quienes trabajamos en las áreas de personal o Recursos Humanos es ofrecer momentos mágicos. Lo que no se olvida son las experiencias, las emociones, por lo que es importante pensar en experiencias que brinden momentos significativos para nuestros colaboradores. Es una cultura hacia el Bienestar.
Si le preocupa el bienestar de su organización, nos encantaría ayudarle. Simplemente contáctenos blissempglobal.com Vamos a re-imaginar el rostro cambiante del bienestar en el siglo 21.
Es hora de fomentar un lugar de trabajo mentalmente apto para una nueva normalidad más feliz, más saludable y más productiva.
Comments