Comienzas tu plan de control de peso con las mejores intenciones, energías y determinación: preparas recetas saludables, haces ejercicios, compras brócoli y quinua en el supermercado, una olla a presión y empiezas como un cohete despegando hacia el espacio, quemando energías, tomando agua, etc. Pero luego pasa algo. Te golpean con un gran proyecto de trabajo, te encuentras cuidando de niños enfermos (o padres) o pasas todo el día haciendo mandados. Cualquiera sea la razón, la vida a menudo no nos deja tiempo (¡ni energía!) para preparar las comidas. Así que pasas por el autoservicio o tomas el teléfono para pedir una pizza, lo que te deja sintiéndose hinchado, desanimado y con la sensación amarga de haber perdido tiempo y dinero. Además con dificultad para volver a comer saludablemente.
Tienes razón en estar preocupado. "Una dieta rica en grasas saturadas, sodio y azúcar puede provocar obesidad, niveles elevados de colesterol en sangre y presión arterial alta, todos los cuales son factores de riesgo de enfermedad cardíaca", dice Isatu Isuk, RD, LDN, dietista de The Johns Hospital Hopkins. Pero hay formas de preparar comidas saludables en casa sin tener que invertir mucho tiempo en planificar las comidas o hacer las compras. También puedes comer de manera más saludable cuando está en movimiento. Estas estrategias pueden ayudarte a mantenerte encaminado incluso cuando te sientas agotado.
En los Restaurantes
Muchos restaurantes ofrecen ahora en sus menús, comidas más livianas, incluso incluyen la cantidad de calorías. Revisa de manera rápida los menús de los restaurantes en línea para ver cuáles ofrecen las mejores opciones antes de salir. Considera estos consejos al hacer tu pedido:
Primero come una ensalada pequeña o una sopa. Es un comienzo nutritivo y abundante que te ayudará a consumir menos calorías en general.
Elige platos principales a base de verduras o con pescado al horno, a la parrilla o asado o pollo sin piel.
Busca comidas que no sean grasosas o aceitosas. Por ejemplo, en lugar de pedir enchiladas de pollo cubiertas de queso, compra tacos de pollo o pescado a la parrilla. Prefiere alimentos sin salsas o jugos cremosos.
Pide sustituir verduras o ensaladas en vez de acompañamientos que engordan, como papas fritas, ensalada de papas con mantequilla.
Las porciones que se sirven en los restaurantes pueden ser demasiado grandes. Revisa si hay porciones más pequeñas disponibles. Los restaurantes a menudo ofrecen "medias" ensaladas o sándwiches. De lo contrario, pide una empaque y prepárate para llevar a casa un tercio o la mitad de la comida.
Si te apetece un postre, opta por fruta fresca.
En las comidas rápidas
Comer comida rápida no significa que tengas que comer una hamburguesa con queso grasosa y papas fritas saladas. En estos días, hay una variedad de opciones de menú donde puedes encontrar opciones más saludables. Muchos restaurantes de comida rápida también tienen sus menús con cantidad de calorías incluidas.
En un restaurantes de sándwiches, es fácil hacer ajustes saludables, como: que no tenga mayonesa, más verduras y pan integral. (Además, también suelen tener ensaladas y sopas). Los restaurantes que ofrecen bowl para armar, opciones vegetarianas o platos de carne y verduras a la parrilla también son buenas opciones.
Pero si está pasando por autoservicio de comida rápida tradicional, ten en cuenta estos consejos:
Evita los alimentos fritos (por ejemplo, papas fritas, aros de cebolla, tiras de pollo y nuggets).
Un sándwich de pechuga de pollo sin piel a la parrilla tiene menos grasas saturadas que una hamburguesa.
Ordena los tamaños más pequeños, no "sobredimensiones" nada. Pedir la versión del menú infantil de tu comida rápida favorita puede darle el sabor que anhelas con muchas menos calorías.
Evita los acompañamientos y aderezos con muchas calorías.
Evita las bebidas azucaradas, prefiera el agua, el té sin azúcar o la leche descremada o baja en grasa.
Comida Casera
Si el tiempo que lleva buscar recetas, planificar lo que vas a comer durante una semana y la compra es lo que le impide comer comidas saludables en casa, hay una solución fácil: Suscripciones de comida. Hay muchas compañías diferentes que venden las comidas para la semana y los entregan en tu casa cada semana. Claro, el costo es mayor que si tu cocinaras y compraras, pero para muchas personas esto es muy conveniente.
-Dedica un día a cocinar para la semana. Cocina las verduras, prepara la base de las ensaladas y cocina las carnes. Puedes preparar las raciones diarios y refrigerar o simplemente puedes dejar las bases preparadas y usarlas con diferentes combinaciones diarias. Si tiene el pollo cocinado, es fácil agregarle especias aromáticas un dia; una salsa de aguacate otro día, o cualquier sabor que desees darle. Y como ya tienes preparados los vegetales y la base de la ensalada solo es de condimentar y listo.
Ya sea que estés comiendo fuera o en casa, es importante pensar en una dieta balanceada. Eso significa asegurarse de obtener una buena combinación de proteínas magras, verduras, frutas, cereales integrales y grasas saludables.
Con una gama tan amplia de opciones de comidas saludables disponibles, y la información que necesita para tomar decisiones inteligentes y buenas para tu salud, puedes disfrutar tus comidas incluso cuando la vida se pone ajetreada, es cuestión de priorizar siempre tu bienestar.
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